La siesta es una pausa tradicional por la tarde en España y algunos otros países cálidos. Los españoles consideran sagrada esta tradición y la consideran parte integral de sus vidas. Para los turistas, la siesta se convierte en una verdadera pesadilla, ya que las puertas de todas las tiendas, museos y centros de entretenimiento cierran a la hora del almuerzo.
La siesta para españoles y residentes de otros países cálidos no es un lujo, sino una norma de vida. Durante la pausa para el almuerzo, que dura tres horas, los españoles se sientan cómodamente en las mesas de los cafés locales y comen un abundante almuerzo, y luego se les da una pequeña siesta. Algunos españoles se van a casa a dormir la siesta, a un parque cercano, a un parque infantil con niños o simplemente a relajarse en el trabajo.
Que es siesta
La palabra "siesta" proviene de la frase latina "hora sexta", que significa "la sexta hora". Para los romanos, el día comenzaba al amanecer, por lo que la sexta hora correspondía a la hora del almuerzo. Siesta tiene sus raíces en el lejano siglo XVII. Los historiadores creen que fue entonces cuando los reyes decidieron hacer del descanso diurno durante las horas calurosas una tradición.
La siesta más corta dura de 5 a 20 minutos. Aumenta la vitalidad y restaura la energía gastada por la mañana. Una siesta regular que dura de 20 a 50 minutos, además de las propiedades beneficiosas de una mini-siesta, limpia el cerebro de información innecesaria, fortalece la memoria muscular y a largo plazo. La siesta más larga es la siesta perezosa, dura de 50 a 90 minutos. Esta siesta es buena para un cuerpo joven y en crecimiento.
Lados positivos de la siesta
Los científicos dicen que aproximadamente 8 horas después de despertarse por la mañana, una persona experimenta un colapso por la tarde. Si, además, una persona ha tomado una comida abundante, se produce una salida natural de sangre del sistema nervioso al sistema digestivo en su cuerpo, lo que provoca somnolencia y una disminución de la productividad laboral. A diferencia de los residentes de otros países, que desayunan copiosamente y solo pican en el almuerzo, es costumbre que los españoles desayunen un bocadillo y dejen una comida abundante a la hora del almuerzo. Por tanto, una pausa por la tarde en España es muy apropiada.
Por otro lado, España es el más caliente de todos los países europeos. El termómetro aquí a menudo se eleva por encima de los 40 grados centígrados, y solo un aire acondicionado frío salva del calor. En tales condiciones, la siesta mejora la circulación sanguínea, previene el desarrollo de depresión y ataques de pánico, normaliza la presión arterial y alivia el estrés. Los científicos señalan que una siesta corta mejora los procesos de aprendizaje y la memoria, restaura la capacidad de trabajo y da fuerzas para funcionar con normalidad hasta altas horas de la noche, a pesar del cansancio acumulado.
Lados negativos de la siesta
Numerosos estudios muestran que la primera fase superficial del sueño que dura hasta 30 minutos es excelente para refrescar el cerebro y restaurar la capacidad de trabajo de una persona. Pero si una persona duerme más de 30 minutos, su cuerpo se sumerge en una fase de sueño profundo, como resultado, se despierta roto y de mal humor. Los españoles prestan poca atención a las advertencias de los científicos: el 90% de los españoles duerme más de 40 minutos después del almuerzo, a pesar de los llamados de los expertos para no hacerlo.
Paradójicamente, pero cierto: es a causa de la siesta que los españoles duermen alrededor de una hora menos que los residentes de otros países europeos. Para compensar la siesta de la tarde, tienen que quedarse en el trabajo hasta las 8 de la noche. Debido al final del día, no aparecen en casa hasta las 9 pm, cenan y hacen sus tareas domésticas diarias a última hora de la noche, y se acuestan mucho después de la medianoche. Tienen muy poco tiempo para pasatiempos y comunicación con sus seres queridos. Teniendo en cuenta que la jornada laboral de los españoles comienza a las 9 de la mañana, podemos concluir que la tradicional siesta priva a las personas de varias horas de sueño nocturno completo.