Si no hay un compañero de viaje, esto no es motivo alguno para rechazar el viaje. Al contrario, viajar solo hará mucho más de lo que cree.
Descansar en compañía es una gran cosa. Pero el único problema es que para nosotros y nuestros amigos y familiares, los horarios no siempre coinciden. Y si no quieres pasar tus vacaciones esperando un compañero de viaje, ve solo.
Las personas cercanas (solo aquellas que, en teoría, deberían haber ido contigo) empezarán a disuadirte de viajar por tu cuenta, pero no escuches a nadie. No tienes que posponer todas las buenas experiencias hasta que algunos de tus amigos tengan algo de tiempo libre. Planifique mejor el viaje de sus sueños: haga una ruta, estudie la experiencia de otros viajeros y continúe con nuevos descubrimientos.
1. Libertad
La ventaja más obvia es la capacidad de no vincular sus decisiones a los deseos de otras personas. Puedes visitar lugares que te interesen, puedes cenar en restaurantes que hayas elegido tú mismo, o puedes alojarte en el hotel si lo deseas. Por supuesto, tendrás que organizar todo el viaje tú mismo, pero ¿es esto un problema?
2. Orgullo
Este viaje te dará la oportunidad de conocerte a ti mismo, de entender cómo te adaptas a nuevas circunstancias y resuelves problemas espontáneos. ¡La autoestima mejorada está garantizada! Perderse en una ciudad desconocida por primera vez y encontrar el camino al hotel tratando de comunicarse con los lugareños en un portugués roto son muchas experiencias nuevas. Y no todo el mundo tiene experiencia en resolver este tipo de problemas.
3. Encuentro contigo mismo
Tendrá la oportunidad de entenderse mejor a sí mismo. Pruebe diferentes cocinas, ande en bicicleta por la ciudad, bucee, visite un templo local, siga sus propios deseos. Es posible que los esté escuchando por primera vez. Conócete mejor a ti mismo: todo lo que amas se quedará contigo, y todo lo superficial e innecesario nunca te volverá a molestar.
4. Conocer el mundo
Su entorno de viaje, cuando no está solo, permanece sin cambios. En un viaje solitario, no hay más barreras entre usted y el mundo que lo rodea, y quiera o no tenga que sumergirse en un entorno completamente inusual. Así que viajar solo es la única forma segura de sentir el "espíritu del lugar". Por cierto, también puedes entrenar un idioma extranjero en paralelo.
5. Conocer a otros
Paradoja: viajar solo te hará olvidar la soledad en su peor momento. Descubrirás que este mundo está lleno de personas, a las que difícilmente habrías podido acercarte en otras circunstancias. Sea abierto y verá el mundo en todo su esplendor.