Munich es la perla de Alemania, la capital del estado federal de Baviera. Se encuentra a orillas del río Isar, al pie de las pintorescas montañas alpinas. Se puede llamar museo al aire libre sin dudarlo. Indudablemente, aquí hay bastantes lugares de interés arquitectónico. Sin embargo, muchas personas asocian esta ciudad bávara con la auténtica cerveza alemana, que todavía se produce aquí según una receta antigua.
Múnich es un caso raro en el que una gran ciudad parece pequeña y muy acogedora, a pesar de lo espinoso de sus numerosos conjuntos arquitectónicos de estilo gótico. Las distancias entre la mayoría de sus atractivos son bastante "peatonales". Es mejor comenzar a conocer esta ciudad desde su corazón: la plaza Marienplatz, alrededor de la cual se concentran muchos lugares de interés. Durante la Edad Media, se celebraron allí torneos de valientes caballeros y ferias. Hoy en día, los músicos y artistas callejeros son los habituales de la plaza. En el centro de Mirienplatz se encuentra la majestuosa Columna de María, considerada la patrona de Baviera. En la plaza principal de Múnich se puede ver uno de los edificios bastante elegantes de estilo neogótico: el Ayuntamiento Nuevo. Su fachada está decorada con numerosos soportales y la torre del reloj agrega sofisticación al edificio. Sus campanadas se pueden escuchar todos los días exactamente a las 11 a.m. Aquí también se encuentra el Antiguo Ayuntamiento, que ha sido reconstruido varias veces a lo largo de su larga historia. Inicialmente, este edificio fue el municipio de Munich, hoy alberga la exposición del museo del juguete, que definitivamente vale la pena visitar. Hay colecciones de juguetes de madera, papel, plumas de pájaro, cera, así como muñecas antiguas y los primeros ferrocarriles de juguete Junto a la plaza se encuentra el templo más antiguo de Múnich: la Iglesia de San Pedro. Vale la pena visitar otras iglesias cercanas, especialmente la dorada Theatinerkirche, así como la Catedral de San Miguel con la bóveda funeraria de los gobernantes bávaros de la dinastía Wittelsbach. También es muy interesante la iglesia rococó de los hermanos Azam, visite el Jardín Inglés, uno de los parques más grandes del mundo. Sus paisajes son fascinantes literalmente desde los primeros segundos. Un gran lugar en Múnich para picnics y paseos románticos, los entusiastas de los automóviles deben realizar una visita guiada al Museo BMW, que se centra en la colorida historia de esta popular marca. Los visitantes del museo tienen acceso a más de un centenar de exhibiciones, que van desde motores de aviones hasta autos conceptuales del futuro, y el Viktualienmarkt, un antiguo mercado de alimentos en la capital bávara, también merece una visita. Durante más de dos siglos, ha habido un vigoroso comercio de productos frescos de las granjas locales. Los puestos del mercado están llenos de caza, mariscos, frutas y verduras exóticas, y el aire está impregnado del olor a productos recién horneados de las panaderías. Por supuesto, no puede dejar de visitar las numerosas ciudades cerveceras. El más grande y famoso de ellos se encuentra cerca de Marienplatz, la cervecería Hofbräuhaus. Fue fundada en el siglo XVII. Aquí no solo puede probar la verdadera cerveza alemana, sino también las famosas salchichas bávaras y codillo de cerdo.
