Elegir dónde ir con su hijo en Moscú durante las vacaciones no es una tarea fácil. De hecho, en la capital rusa hay muchos monumentos arquitectónicos, teatros, museos, parques de atracciones y otros lugares notables. Por lo tanto, a veces puede combinar una visita a los lugares más populares con los que no son los más famosos.
Instrucciones
Paso 1
Sería un gran error no llevar a su hijo al zoológico de Moscú durante las vacaciones. No solo es uno de los más grandes de Europa del Este, sino que también tiene una selección muy extensa de animales, aves, reptiles. El zoológico de Moscú tiene osos, zorros, elefantes, cocodrilos, focas, pingüinos, linces, búhos y otros habitantes. Para poder ver todos los animales, tienes que venir aquí hasta la apertura. No suele haber colas en taquilla, por lo que comprar una entrada no será un gran problema. Pero el niño tendrá muchas impresiones.
Paso 2
Si un niño gravita hacia la cognición del mundo y varios tipos de experiencias, entonces él y sus padres tienen un camino directo al museo Experimentarium de ciencias del entretenimiento. Aquí puede realizar experimentos químicos y físicos, tocar varios instrumentos musicales, familiarizarse con la estructura de una persona y, en general, aprender sobre el mundo y cómo funciona. Por lo general, se necesitan al menos tres horas para inspeccionar este museo y realizar la mayoría de los experimentos. Por lo tanto, los padres deben estar preparados para el hecho de que su hijo decida quedarse un poco aquí.
Paso 3
También durante las vacaciones, el niño puede ser llevado al Teatro Bolshoi para el ballet Cascanueces. Esto será especialmente apropiado si ocurre durante las vacaciones de invierno. El cuento de hadas magníficamente escenificado de Hoffmann no dejará indiferente a nadie, y la maravillosa música de Tchaikovsky hará las delicias de adultos y niños.
Paso 4
Recientemente, el Museo de la URSS se inauguró en el territorio del Centro de Exposiciones de toda Rusia (VVC), que goza de un gran éxito. Hay una exposición muy extensa de cosas, equipos, muebles y juguetes de la época de la Unión Soviética. Este museo también es famoso por el hecho de que hay una sala que simboliza el mausoleo de Lenin. Lo que pasa es que en esta habitación yace un muñeco de Lenin, que … respira. Asusta a alguien, ríe a alguien, pero ciertamente no deja indiferente. Y después de visitar el museo, puede jugar a las máquinas tragamonedas soviéticas: Sea Battle, Rally y Safari.