Viajar es una maravillosa forma de recreación. Playas soleadas, aire marino y naturaleza hermosa, todo esto agrada la vista y calma los nervios. Sin embargo, muchas personas optan por ir de compras al extranjero.
Turquía es un gran país para comprar. Aquí puede comprar no solo souvenirs, sino artículos de interior, ropa, té, dulces e incluso joyas.
Qué comprar en Turquía
Todo el mundo sabe que Turquía es famosa por sus textiles. Se vende en cualquier tienda, en bazares. Los tour operadores incluso ofrecen viajes especiales a la fábrica, donde se puede comprar ropa de cama, toallas, batas de bambú y algodón para toda la familia. El tejido de bambú conserva su aspecto original durante mucho tiempo, no se desvanece al lavarlo, es muy agradable para el cuerpo, absorbe perfectamente el agua. La gran ventaja del bambú son sus propiedades hipoalergénicas. Por eso, vale la pena comprar toallas y un albornoz de fibra de bambú para niños.
Las fábricas turcas ofrecen una gran selección de artículos de cuero. La elección de estilos y colores es asombrosa. Las tiendas de artículos de cuero se distinguen no solo por precios asequibles, buena elección, sino también por un servicio agradable y un personal amable.
Pero no todo el mundo decide comprar cuero en Turquía, y no es conveniente llevar chaquetas y chaquetas en una maleta. Pero las compras en este cálido país son tan diversas que es imposible irse sin comprar.
Por ejemplo, los amantes de los dulces deben probar y comprar delicias locales llamadas delicia turca y sorbete. Los dulces turcos son naturales y consisten en jugos de frutas espesados, nueces y frutos secos. En cualquier tienda, puedes probar todo por adelantado.
Para los dulces, cualquier vendedor ofrecerá té. También puedes elegirlos para todos los gustos: negro fuerte, verde e hibisco. La composición completamente natural y la excelente calidad distinguen a los tés turcos de los demás.
Reglas de compra en Turquía
Todo el mundo sabe desde hace mucho tiempo que los turcos inicialmente liquidan el precio de cualquiera de sus productos para tener la oportunidad de negociar. Primero debe preguntar el costo y luego dividirlo por la mitad. Por supuesto, no todos los comerciantes harán ese descuento, pero si lo intenta, puede reducir significativamente el precio.
Si el tamaño del descuento no le conviene, debe pedirle un regalo al vendedor turco. Puede ser un paquete de té, un imán, un plato o una toalla pequeña. En cualquier caso, el proceso de negociación traerá placer a ambas partes.
Y, por supuesto, no debe realizar compras el primer día de su llegada a Turquía. Vale la pena recorrer algunas tiendas, ir al bazar y luego decidir dónde es mejor comprar lo que necesitas.