Estrictamente hablando, unas vacaciones en París se pueden planificar de dos formas: o paseando sin rumbo ni ruta, simplemente disfrutando del hecho de que está cerca una de las capitales más bellas de Europa, o organizando un recorrido por los lugares de interés de París.. Esto es exactamente lo que hará un viajero experimentado, conociendo el precio de cada excursión.
Torre Eiffel
La Torre Eiffel se considera el sello distintivo de París y de Francia en general. Sin embargo, los propios parisinos no comparten el gran amor de los turistas por su principal atractivo. No es ningún secreto, por ejemplo, que Hugo ha declarado repetidamente que no hay lugar para la Torre Eiffel en la capital de Francia.
A su vez, es hora de que los turistas organicen peregrinaciones a la Torre Eiffel. Su gracia no es ostentosa: la estructura tiene un peso récord y es literalmente el pináculo de la ingeniería y el pensamiento arquitectónico.
Arco triunfal
Otro punto imperdible de la ruta para cualquier turista es el mítico Arco de Triunfo. Esta fantástica estructura se encuentra en la plaza Charles de Gaulle. Todo el arco está decorado con bajorrelieves históricos de la época de Napoleón: batallas, siluetas victoriosas y graciosas imágenes de F. Ruda.
La construcción del Arco de Triunfo duró casi dos años, durante los cuales Napoleón ya estaba enterrado. Erigido como símbolo del valor del ejército francés, el Arco de Triunfo realmente cumplió su propósito cuando los restos de un soldado desconocido fueron depositados a sus pies.
Basílica del Sacre Coeur
En el 35, rue du Chevalier de la Barre, hay un monumento impresionantemente elegante: la famosa Basílica del Sacré-Coeur. Los arquitectos franceses tardaron casi cuatro décadas en completar este magnífico edificio.
La peculiaridad de la Basílica es el inimitable tono lechoso de la fachada. Los antiguos constructores lograron este efecto gracias al uso de un mineral único a partir del cual se construyó el templo. Bajo la lluvia, la piedra se vuelve aún más blanca, creando el efecto del brillo de toda la estructura.
Lumbrera
No todo turista incluye una visita al Louvre en un programa obligatorio, pero en vano. Lo que hace que este evento sea problemático es que siempre reinan colosales colas en el Louvre, y hay que admirar furtivamente sus exhibiciones favoritas, por temor a no tener tiempo para familiarizarse con toda la riqueza del patrimonio histórico recogido bajo los arcos del Louvre.
Pero esto no debería asustar a los afortunados que quieran familiarizarse con la colección de arte creada por la humanidad a lo largo de 5 siglos. Las exposiciones del Louvre te permiten familiarizarte con los lienzos de Goya, Delacroix, Tiziano, El Greco, Rafael y, por supuesto, Leonardo da Vinci y su obra maestra permanente Gioconda.