Parecería que todos conocen las reglas simples para el cuidado de los dientes y las encías. Además de cepillarse los dientes dos veces al día y enjuagarse la boca después de cada comida, debe visitar regularmente a su dentista con fines preventivos y terapéuticos.
Pero ¿qué pasa con las personas que, debido a los intensos ritmos de trabajo, están casi constantemente en movimiento, trabajan mucho y no tienen la oportunidad de prestar la debida atención a su salud y, en particular, a la salud de los dientes?
Afortunadamente, en estos días hay una gran variedad de equipos médicos para el hogar, así como todo tipo de dispositivos portátiles que lo ayudarán a cuidar su salud en cualquier condición, ya sea un vuelo en avión, una parada en medio de la taiga, o un hotel en Shanghai.
Uno de estos dispositivos es un irrigador portátil de última generación que es tan liviano que cabe fácilmente incluso en el bolsillo más pequeño de su bolsa de viaje. Alimentado por una potente batería, este dispositivo limpia la boca con intensos chorros de agua y previene el crecimiento de bacterias patógenas.
El uso regular del irrigador es una excelente prevención de la caries dental, el sarro y la placa amarilla, la estomatitis y otras infecciones virales, así como un excelente remedio para masajear las encías, lo que mejora el flujo sanguíneo y por lo tanto contribuye a la salud dental.
Otro dispositivo de limpieza oral electrónico popular es el cepillo de dientes eléctrico. Cepillarse los dientes con un dispositivo de este tipo se vuelve mucho más rápido, más eficiente y más efectivo que usar un cepillo tradicional común. Si valora su tiempo y la belleza de su sonrisa, entonces este invento portátil funcional es para usted. Gracias a los vigorosos movimientos giratorios, las pequeñas cerdas del cepillo electrónico son increíblemente rápidas y limpias para limpiar los dientes y los espacios entre ellos, liberando la cavidad bucal de restos de comida y microbios.
La única circunstancia que puede provocar problemas, y que debe tenerse en cuenta a la hora de comprar aparatos eléctricos portátiles diseñados para cuidar el estado de los dientes, es la sensibilidad individual de las encías y el grado de sangrado de las mismas. Si las encías son muy susceptibles a daños mecánicos, es mejor no utilizar los dispositivos descritos para evitar la aparición de enfermedad periodontal.