Cuando una persona viaja a un país donde nunca ha estado, él, por regla general, quiere no solo ir de excursión, sino también probar la cocina local. Por desgracia, el conocimiento de la comida exótica y el deseo de probar todo a la vez, y todo conduce a la aparición de varios kilos de más, que luego son difíciles de eliminar.
Al volar a otro país, las zonas horarias cambian, el clima y la dieta cambian. Todo esto puede provocar estrés y, como resultado, un aumento de peso. Si viaja a un país con un clima cálido, intente aumentar la cantidad de líquido que bebe a unos tres litros. Al llegar al país por la noche, trate de no llenarse de inmediato, incluso si tiene hambre, sino de comer una ensalada ligera o un yogur.
En el almuerzo, no te apoyes en platos tradicionales nacionales, pruébalos poco a poco y con mimo para que no haya problemas con los intestinos. No te dejes llevar por las verduras fritas en aceite de oliva: pueden parecer dietéticas, pero de hecho seguro que se convertirán en un auténtico problema para tu figura. Incluso una pequeña porción puede exceder su ingesta diaria de grasas. Es mejor quedarse con ensalada de verduras frescas.
Recuerde que cada cocina nacional tiene sus propios platos ricos en calorías que pueden estropear seriamente su figura. Por supuesto, esta no es una razón para rechazar por completo los alimentos nuevos e inusuales, pero será mejor si da preferencia a los alimentos exóticos, sabrosos pero más ligeros.
Los restaurantes turcos suelen ofrecer un plato tan popular como la berenjena frita sazonada con ajo y perejil. Si no está acostumbrado a esos alimentos grasos, es mejor rechazarlos. Al elegir su primer plato, opte por la sopa de lentejas, que es más ligera que la tradicional sopa grasosa de menudencias de oveja con vinagre y ajo. Es mejor elegir frutas del postre en lugar de delicias turcas altas en calorías, que consisten en miel o azúcar con la adición de nueces, frutas secas y almidón. Este delicioso postre agrega pliegues a los lados muy rápidamente.
En España, puedes pedir ensalada de bacalao, solo pide que la preparen con bacalao remojado con tomate y cebolla morada. Si el pescado no se remoja, la ensalada estará demasiado salada y puede causar hinchazón. Para el segundo, puedes pedir paella. Se trata de una pechuga de pollo con arroz, verduras, camarones y salchichas. Acuerde no agregarle salchichas, porque contienen una gran cantidad de grasas animales. La sangría, la bebida nacional elaborada con vino tinto seco, es adecuada para este plato.