París es una de las ciudades más populares del mundo. Hay muchas formas de pasar el tiempo aquí. Muy a menudo, las personas que van a venir aquí por primera vez hacen la pregunta de cómo comportarse en París.
Necesario
- - una guía de París;
- - mapa del metro;
- - Libro de frases ruso-francés;
- - Entradas a las principales atracciones.
Instrucciones
Paso 1
Inicie cualquier comunicación con Bonjour cortés, incluso si cambia a otro idioma. Utilice un libro de frases para componer frases más complejas. Desafortunadamente, el inglés y otros idiomas no se hablan mucho en Francia. Aprenda al menos algunas palabras de francés. Los franceses son fanáticos de su idioma. Reemplaza las palabras que te faltan con una sonrisa. No te olvides de la otra palabra mágica: merci.
Paso 2
Aprenda a utilizar el metro de París. A primera vista, su plan es impactante. Pero si observa de cerca, resulta que la gran cantidad de líneas brinda la conveniencia de los trasplantes. Cada ruta está marcada con su propio color y número. Para ingresar es necesario comprar un boleto de cartón. Pero tenga en cuenta que es más fácil conseguirlo por dinero en efectivo en el centro, y en las afueras de las máquinas en las estaciones a menudo se configuran para tarjetas plásticas. Si domina el metro, sus movimientos serán más fáciles.
Paso 3
Camina por Montmartre, sube a la Torre Eiffel. Hay algunos lugares más emblemáticos para visitar. En primer lugar, este es el Louvre, el Barrio Latino, Montparnasse. Estudie su guía de París y cree su propio plan turístico. El número de museos importantes de la ciudad es grande. No se pierda el famoso d'Orsay, donde se exhiben los impresionistas. No te olvides del Centro Pompidou si no eres indiferente al arte contemporáneo. Sube a la Torre Montparnasse, donde se encuentra la plataforma de observación en el piso 56. Además, el centro de París se puede ver desde el campanario de Notre Dame de Paris. Deberá comprar boletos para todas las atracciones principales.
Paso 4
Elabora un plan de viaje gastronómico. La cocina francesa requiere un pensamiento reflexivo. Además de las baguettes y los croissants, debe probar los famosos quesos: Camembert, Brie, Roquefort. Se pueden degustar los vinos por la tarde, pero lo principal es no emborracharse. Y las pastelerías de París merecen una atención especial. Alguien está loco por la crema de caramelo, mientras que otros prefieren el crème brulee con corteza horneada. En restaurantes y cafés, es costumbre dejar una pequeña propina incluso si el cargo por servicio está incluido en la factura.